Sobre las entrañas de definir a un homosexual.

Hace unas semanas estaba hablando con un amigo referente al tema de lo rutinario que puede llegar a ser el sexo en las parejas que al convertirse en tal, evolucionan su relación con nuevas poses o gustos sexuales.

Hace como 8 años atrás hablaba del tema de definir cada una de las corrientes de un homosexual. Al pasar los años he reflexionando al respecto y he llegado según yo a lo más profundo de la cuestión.

Las preferencias sexuales son tales y no se le debe de mezclar con el asunto de definir por ello el concepto de homosexual a una persona. A todo el mundo le considera normal apreciar un cuerpo estético, ya sea de su mismo sexo o no. No quiere decir que con ello una persona al apreciar un cuerpo de su mismo sexo este ya sea homosexual. En parte se podría empezar en ello, pero puede ser normal el verlo al considerar tus defectos en comparación al mismo.

Hace 8 años definía las variantes del homosexual en sus gustos, en aquel que le gustaba que le dieran y que no gustaba dar, aquel que le gustaba dar y no le gustaba que le dieran, jotos, gay, transexuales, caquinos, etc. Hoy he llegado a la conclusión tanto por fundamentos físicos como espirituales como se debería de definir a un real homosexual.

Claro está que con ello lo único que reflejo es el hecho de que autorizándose las bodas de homosexuales en el Distrito Federal, jacta la ignorancia en un tema tan importante como lo es el matrimonio si en realidad no se ha definido que es un homosexual.

El termino global todo el mundo lo conoce, pero a lo que voy es al analizar cada fin del  “porque llego a ser homosexual” equis persona.

Cuando una pareja se junta y desarrolla el noviazgo puede o no iniciar una vida sexual, por diferencias religiosas morales o lo que quieran. Pondremos el ejemplo de una pareja joven para no confundirnos con alguien ya desarrollada que es más complejo la explicación. Cuando inician su vida sexual esos jóvenes empiezan a tener relaciones sexuales que se jactan de lo normal, una simple cúpula mas. Conforme pasa el tiempo la libertad que se tiene en la cama para cada uno de los involucrados llega a una monotonía y empiezan a experimentar otras cosas, pudiese ser hacerlo en lugares raros no sé. Conforme evolucionan como pareja se adentran a otras preferencias no usuales dentro de la humanidad. Usuales dentro de la humanidad no creo que sea el concepto correcto, ya que sus cuerpos se están conociendo. No aplica tanto el concepto debido que hasta no hace unos milenios las parejas no se besaban. Lejos está el pensar que se mamaban mutuamente. En fin.

El cuerpo humano es muy extraño y conforme pasa el tiempo cada uno de los involucrados va conociendo cada vez más el cuerpo. Por placer del hombre se inicia el sexo anal. El 90% de las mujeres se niegan a realizarlo, pero aquellas que le entran el 90% lo repiten ya que consideran placentero eso. Cuando inicia el sexo anal inicia a la par una carrera por conocer cada vez más el cuerpo. Ya no solo se experimenta con la mujer sino que puede llegar el caso de que el hombre haya cometido el “error” de dejarse penetrar. Todo parte de la evolución de la relación, de las variantes que realizaran.

Error lo pongo entre comillas ya que se sabe el hombre tiene la posibilidad de sentir mucho mas placer que la mujer. La mujer en parte lo hace por complacencia del hombre al menos al principio, pero sabiéndolo combinar repercute en una buena experiencia. En el caso del hombre es normal que le agrade por la posición en que se encuentra la glándula seminal que hace eyacular al mismo y que esta se encuentra muy cerca del recto.

Estamos hablando de placeres. Estamos hablando de que la pareja en cuestión se está descubriendo. El hecho de que la mujer acepte sexo anal no quiere decir que este sodomizada y sea una esclava sexual para el hombre. El hecho de que al pelado le guste que su mujer le meta un dildo no quiere decir que le agraden los hombres.

Es como el inicio, cuando la pareja le empezó a variar y experimento en otros lugares su sexualidad, públicos o no, quitándose de la monotonía de la cama. Así pasa con el sexo anal tanto del hombre como con la mujer. El problema aquí es la evolución.

Fin de primera parte.